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El blog del Santi

Volumen 2

Volumen 2

A la izquierda, el inigualable ¡¡JOHNNY!! ¡¡JOHNNY!! ¡¡JOHNNY!!. El del la derecha, el tambien inigualable Álvaro, aunque no pa exclamar 

 

21 de octubre de 2007

Ir en este tétrico, quimérico, erosionado, mugriento, chorreante; milagrosamente, a morder el suelo, ñoñamente medido, acerca certeramente cada aguijón. Tinieblas. Te echas chorros de medicina. Nos dijiste que menores quiebras respondieron a tu lamentable dolor. Sólo y melancólico, jornadas después peregrinaste dificultosamente. Damasco.

Hay que ver lo quedao que acaba alguno tras su estancia en Damasco.

 

Primer día de clase. Me la han liado. Me han puesto en nivel principiante a saco, y me he pasado la mañana diciendo “Hola me llamo Santiago, soy español de Madrid, soy soltero y vivo en Bab Tuma”. No sé si parecía más una reunión de alcohólicos anónimos o una clase de adaptación de mongolitos. Nos sentábamos en U, yo estaba en un extremo, y no os perdáis los personajes.

Empiezo:

Con el número 1, en el otro extremo de la U, justo enfrente mío… ¡Joseph!, de orígenes árabes pero nacionalidad sueca, muy amanerado, pero aún mucho más bizco. Bizquísimo, me estaba muriendo, cuatro horas teniéndole enfrente, y encima no se empapaba de nada. Me quería morir, no sé si de nervios o de risa.

A su derecha, con el número 2, Will, que más bien debería llamarse ¡¡Johnny!!, porque es verle y que te entren ganas de gritar ¡¡Johnny!!. Rían, Álvaro y Jorge me entenderán si les digo que es que peinaba igual y vestía parecido a ¡¡Johnny!!, el danés de Amman.

A su derecha, con el número 3, Bates (de béisbol, no te jode) una piva que en realidad se llama algo así como Lydia Jutchinson, mujer de ¡¡Johnny!!, perdón, Will. Americanos ambos, de New York. Allí no les quieren.

Junto a Bates, con el número 4, Milda, o Milna, o algo así, una lituana que andaba más perdida que un hijoputa el día del padre. De las dos pivas de la clase, la que mejor está, y la única soltera –que gran futuro me espera como Casanova del aula-.

De Milda pasamos a Edouard, un parisino que como tal no sabe pronunciar la R, y al que he dado una gran alegría hablando en francés, pues no encontraba quien hablase su lengua materna. Un poco capullín, pero sin llegar a despreciable.

Acabamos el otro brazo de la U y llegamos a la parte de abajo, empezando con Christian, de Chicago del campo, Illinois. Es decir, yanki también. Así en plan el chulito malotillo de la clase que va de que se las sabe todas pero ni puta idea.

Haciéndole compañía, un espécimen parecido, pero sueco también, el Benja, de Uppsala (es ahí donde está estudiando la hermana del Tali ¿no?) También se peina como ¡¡Johnny!!, pero no llega a su nivel de anacronismo.

A todo esto la profesora se llama Rana, no Rania como Rania de Jordania, Rana como las ranas.

Bueno, mañana más, que todavía tengo a medias el viaje a Petra, que al final lo haré en tres cachos, porque lo que me va a ocupar ahora merece su propio capítulo.

 

Habíamos llegado a Wadi Musa, la ciudad de verdad que hay junto a Petra, y nos bajamos a 100 metros del albergue. Yo no quería ir al albergue, quería agua, y estuve odiando un rato hasta que en el albergue me dieron agua.

Regentaba el tal albergue, llamado CleoPetra (y esto es sólo el principio) un notillas de cuyo nombre no quiero acordarme –en serio- que nos recibió en inglés pero luego siguió con un rudimentario español. Nos dijo como se llamaba, no nos importó, y que sólo podíamos quedarnos si iba a ser para una semana.

-Do you know why?

-No, why? (en realidad no nos importaba, pero tampoco queríamos dejarle mal tan pronto)

-‘Cause we like to feel like a family

-Ahhh (que soplapollas)

Después nos sirvió un té, y cuando encendimos nuestros fitis se fue porque dijo que en ramadán el no podía y le daba todo el mono. Yo personalmente fui de la opinión de que se podía ir jodiendo, que no iba a apagar mi fiti. Era muy muy amable, pero en serio, es que era un soplapollas.

Cuando nos acabamos los fitis, nos fumamos otro fiti, por si subía. Pero subió igualmente y empezó con la brasa en casa. Nos dijo que nos podíamos quedar aunque fuera sólo un día, que lo de la semana y la familia era broma (una de sus bromas de soplapollas), y nos contó su vida. Que quería ir a Alicante (“la playa, la fiesta” que soplapollas) y que le gustaba dancing, pero no dancing normal, estriptis dancing, hizo unos cuantos movimientos de soplapollas y nos dijo que era broma, solo dancing.

Me quedé con las ganas de decirle que si se iba a Alicante ya podía irse dejando de Islam y ponerse a privar, porque como se comportase así sin la excusa de ir pedo iba a cobrar, pero luego pensé que sería más divertido que lo aprendiese después de la segunda paliza, o de la tercera, y me callé.

Nos llevó a nuestra habitación y pudimos disfrutar de su no compañía un rato largo, hasta que nos atacó el hambre, momento que aprovechamos para salir veloces no pudiendo evitar que nos despidiese con una estúpida y sinceramente amable sonrisa en su cara de soplapollas –puede que nunca haya odiado más injustamente a nadie, lo reconozco-.

Hicimos una pequeña compra de pan, atún y quesitos para comer al día siguiente y nos fuimos a cenar a un buffete de cinco pavos, también llamado CleoPetra, en el que tuvimos que pelear a muerte con un grupo de 6 alemanes que cada vez que salía una bandeja de pollo la vaciaban en un solo viaje, pero con paciencia y tesón conseguimos ponernos del revés. Después nos arrastramos otra vez hasta el CleoPetra albergue. A eso de las 12 conseguimos sobarnos, hasta las 5, en la que la llamada al rezo nos despertó para dejarnos volver a dormir hasta y media, hora que sonó el despertador. Porque Petra abre a las 6.

 

…to be ended…next episode.

 

 

FRASECILLA PARA PENSAR

“Calla. Y trabaja el huerto.”

Sale al final de “Cándido”. De un tal Voltaire, que no es que el inventó los voltios, sino un francés que pensaba, pero a diferencia de la mayoría de franceses de la época que pensaban, este hacía cosas de risa, de reírse vamos, de jijí jajá, pero con mensaje.

2 comentarios

Ruwen -

Joder chaval acabo de volver del Caldérón. 4-0 al Zaragoza y jugando de la ostia. Mañana me acerco a por el visado, ya te cuento.

perspicuo -

se llamaba Musta el tipo del albergue y si dices su nombre tres veces delante de un espejo aparecerá para brasearte